sábado, 30 de octubre de 2010

¿Hay vida mas allá? mi respuesta......

¿Hay vida más allá? -Mi respuesta...

Desde pequeña siempre tenía mucho miedo a la muerte, crecí con ese temor hasta que llegué a este país, donde al fin pude saciar todas mis ansias de leer, documentarme y estudiar todo lo que me ha gustado. Pienso que el conocimiento es lo más valioso que una persona tiene. El dinero, las propiedades materiales, van y vienen, los títulos los puedes adquirir y quedarte varado en ellos, hay quien pasa por la Universidad y es como si no hubiese pasado, porqué se cierra al aprendizaje que va en curso con la vida y sus adelantos, pero hay cientos de miles de personas autodidactas, que tienen mucho conocimientos por sus lecturas, por la radio que escuchan, los programas educativos que ven en televisión, etc.
Fundamentalmente los libros y hoy en día con el desarrollo electrónico en Internet, tenemos una inmensa fuente de documentación.
Pues uno de los autores que comencé a leer al llegar a este país 1992, fue el Dr. en medicina Raymond Moody, uno de los más grandes investigadores en Tanatología, su libro Vida después de la vida, fue el primero de ellos que pude leer. Luego un libro maravilloso donde el prólogo estaba escrito por el Dr. Moody, de la autora Betty J. Eadie, titulado, He visto la luz, cuyo ejemplar para siempre he dejado en la cabecera de mi cama. Ahora aquejada de una enfermedad desde hace seis años, como es el cáncer; pienso que quizás estaba realizando un entrenamiento para recibir conocimiento desde otro plano de inteligencia, y que la llamada vida no termina con la muerte para mí ahora transición. La vida de los humanos y seres terrestres nos parece que es la única pero para mí no es así.
Luego de entrar en el mundo de la metafísica y de los estudios de los fenómenos paranormales, debido a la misma ocurrencia de nuestra trayectoria, cambié totalmente la forma de ver la vida, lo que nos ocurre, lo que a veces nos conlleva a sufrir y por supuesto el concepto de la muerte y el miedo a la misma. Luego continué investigando y leí un interesante libro, de un matrimonio ambos médicos, que habían perdido en un accidente de automóvil a su única hija Diamela, ellos empleando métodos de Trans Comunicación Instrumental, comenzaron a tener comunicación con su hija a través de grabaciones, y de hecho se han celebrado congresos mundiales con grupos de personas que sostienen intercambios y comunicaciones con seres que han partido a otros planos.
He tenido muchas experiencias personales de canalizaciones a través de mi persona, pero una de las más interesantes fue, la comunicación con un gran amigo y colega de trabajo que día a día acostumbraba yo a leerle un capitulo del libro que he mencionado He visto la luz, una noche me dice que le llamara al los para-médicos que tenía un fuerte dolor en el corazón, inmediatamente por mi segunda línea establecí la comunicación y lo trasladaron al hospital, días mas tarde se quedó dormido y así partió, recuerdo que esto me produjo una tristeza muy profunda, cuando al tercer día de su partida justamente, yo dormía, siento como si me acariciaran el brazo o algún insecto caminará por él, me desperté de pronto, encendí la lámpara y el reloj daba las campanadas justo eran las tres de la madrugada y en ese momento sentí su voz en mis oidos que me decía, -no llores estoy en el lugar que me describiste en el libro- desde ese momento no lloré más porque una gran serenidad se apoderó de mi. Hace años deje de asistir a los funerales, y realmente como tengo la certeza de que hay otra vida, me disgusta mucho lo triste que son y poco reconfortante a veces para los familiares. Creo que el alma, si así le podemos llamar a la energía que nos guía en la tierra, parte o sale a una velocidad luz de nuestro cuerpo físico, y puede incluso presenciar lo que está ocurriendo en ese momento, para luego empezar a transitar a su próximo destino junto a seres de igual grado de evolución espiritual.
Claro que este tema es muy extenso de abordar para reducirlo simplemente en un artículo. Aquí sólo estoy respondiendo a una pregunta que yo misma me hago, o dando mi opinión y testimonio personal. Creo en la vida después de la vida, y no podemos vivir con temores, cada uno de los que estamos en la tierra, traemos una misión una agenda que cumplir, un día de llegar y un día de partir, tenemos el libre albedrío y nadie debe tratar de manipular la vida de otro ser humano, hasta nuestros hijos y sus comportamientos son el resultado de sus propias agendas, podemos educarlos, querer que sean buenas personas, pero ellos escogerán el plan a seguir en la tierra. Creo que es una buena esperanza para todos saber que la despedida no es por mucho tiempo, que nos volvemos a ver en otro lugar, que la vida tiene continuación, que nuestros seres amados que han partido están muy cerca de nosotros y que existe la comunicación.

Podemos limpiar y sanar el hígado: Cardo Mariano

Podemos limpiar y sanar el hígado: El cardo mariano, (milk thistle)
Muchísimas personas consumen alcohol, o toman muchos medicamentos, que tienen efectos secundarios. Tanto el hígado como el páncreas se ven muy afectados por lo que nosotros tomamos. Hoy en día las enfermedades mortales como la cirrosis hepática, el cáncer de páncreas, esófago, estomago e hígado entre otros han aumentado sus estadísticas. Muchas personas están desesperadas buscando alternativas ante estos serios diagnósticos. Lo sé ya que en estos dos últimos años de mi vida, he estado dándome terapias consecutivas de quimioterapias y en estos centros es donde podemos apreciar y ver cuantas personas están padeciendo esta enfermedad y sobre todo jóvenes o personas de la mediana edad.
Muchas veces tenemos en nuestras manos, el poder de prevenir las enfermedades, pero desconocemos la medicina natural, o somos escépticos y sólo tenemos fe en lo que nos dicen los médicos. La medicina tradicional. Olvidamos que los medicamentos casi todos se fabrican de frutos, plantas, semillas, entre otras cosas, que son llevadas a laboratorios para ser transformados en pastillas, sueros, etc. Ejemplo de ello son las quimo: el Taxol se realiza con la letal semilla de un árbol llamado Tejo, que en nuestras manos es imposible comerla ya que es un fuerte veneno.
En el mundo contemporáneo nuestro hígado tiene una misión casi imposible. Una de las funciones principales de este órgano vital y es la de procesar y desintoxicar numerosas sustancias que ingerimos o que nuestro propio organismo produce. En nuestros dias la contaminación ambiental, los cientos de sustancias químicas tales como: pesticidas, hormonas, antibióticos, y residuos de metales pesados presentes en los alimentos que ingerimos, añaden una carga adicional a la ya pesada carga que siempre ha tenido el hígado. Y como dije al principio a esto se le añade, el consumo de drogas ilícitas, medicamentos, el excesivo de alcohol (todo lo cual es procesado por el hígado) también los excesos alimentarios en que incurren muchas personas y debemos concluir que bajo estas condiciones no es de extrañar que las enfermedades del hígado se hayan convertido en algo común.
Esta planta llamada cardo mariano o cardo lechoso, es una planta con una larga historia como sustancia protectora del hígado. Y por las investigaciones que hago leyendo bibliografías para ayudarme durante mi enfermedad sé que también tiene su utilidad en el tratamiento de dolores de cabeza, neuralgias y algunas condiciones alérgicas. La atención moderna se ha centrado en sus efectos protectores y regeneradores del hígado. Las investigaciones modernas confirman este uso. Un artículo publicado en 1991 en la importante Revista Euro se señala que el cardo mariano es indudablemente el agente farmacéutico mejor documentado para el tratamiento de las enfermedades del hígado.
La silimarina es el principal compuesto protector del hígado en el cardo mariano. Este compuesto presente principalmente en las semillas actúa como antioxidante en las células del hígado protegiéndolas de los daños causados por radicales libres. La silimarina también incrementa la capacidad del hígado para regenerarse mediante la producción de nuevas células saludables. También mejora la capacidad del hígado para eliminar toxinas del organismo.
Numerosos estudios confirman los efectos benéficos de la silimarina en casos de hepatitis crónica, cirrosis y degeneración grasa del hígado. Los efectos más dramáticos se producen en casos de cirrosis y de hepatitis tóxica.
Según un estudio publicado en octubre de 2006 en la revista Phytotherapy Research, la silimarina también tiene la capacidad de ayudar a quienes padecen de diabetes tipo 2 a controlar sus niveles de glucosa y reducir el nivel de glicación, es decir, la cantidad de hemoglobina que se encuentra unido a moléculas de glucosa, este es un proceso dañino que en los diabéticos se produce a niveles elevados y es causante de muchas de las complicaciones de esta enfermedad.
La mejor forma de administrar el cardo mariano es por medio de cápsulas estandarizadas a un contenido de 140 miligramos de silimarina. Se puede comenzar con una cápsula dos veces al día y aumentar a tres veces al día de ser necesario. El te de cardo mariano no parece ser tan efectivo como las cápsulas ya que la silimarina es una sustancia que no se disuelve muy bien en el agua.
Pues he querido con este articulo, dar mi testimonio de una intoxicación que sufrí donde las encimas hepáticas subieron a un alto nivel, gracias al Cardo Mariano en tabletas pude restablecer las funciones hepáticas, y ahora cada vez que hago tratamientos naturales o tengo que ingerir antibióticos, trato de durante diez días tomar estas tabletas naturales para desintoxicar el hígado, que es un órgano vital que todos debíamos apreciar mucho por su importante función. No es una prescripción consulte con su médico, si tiene duda acerca de lo que expongo, pero se vende sin receta médica en todas las farmacias y puede leer el frasco. En ingles, ya sabe su nombre es Milk Thistle.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Los biberones en niños. Riesgos actuales

Los biberones en niños. Riesgos actuales.

Aún recuerdo como yo disfrutaba los pomos de leche que me daba mi abuelita, hasta tres veces al día, cuando yo tenía unos diez años. Por ello también he tenido que sufrir con una desviación mediana de mis incisivos centrales que nunca fue corregida.
En aquellos años la tecnología no estaba tan avanzada como ahora. La leche se calentaba al fuego en un jarrito o vasija, se le echaba el chocolate o el café, que también se cocinaban a la candela de los fogones de la época.
Sin embargo las cosas han cambiado mucho, ahora todo, o casi todo lo que preparamos y calentamos lo hacemos en los llamados hornos micro- ondas, y he aquí que todo tiende a ser mucho más cómodo, rápido y avanzado.
También de un tiempo hacía acá, las enfermedades han crecido, sobre todo por estudios que he leído en otra de las grandes tecnologías contemporáneas: las bibliotecas de Internet. El cáncer de esófago, estomago, de mamá y otros tiene una mayor incidencia en nuestras vidas y no sólo golpea a las personas mayores, sino también a los niños, jóvenes y como todas las enfermedades, no escoge ni razas, ni nacionalidades, ni edad de seres humanos.
Por ello este artículo es hoy un llamado a los padres y personas adultas que están a cargo de pequeñas criaturas, de esos niños que llegan a adolescentes tomando leche en biberones y estos últimos a su vez calentados en los llamados micro-ondas.
El peligro radica no sólo en la desviación de sus dentaduras, pues cuando un niño pasa de los dos añitos ya está apto para tomar la leche en una jarrita, empezar a utilizar cubiertos, y comenzar la educación de su auto alimentación por sí mismo.
Muchas veces cuando llegan a los 10 o 12 años con biberones, tienen que ir al ortodoncista para poner correcciones en sus dientecitos. Pero a lo que me quiero referir exactamente hoy; es al peligro más grande las radiaciones en teteras de gomas, y en pomos plásticos que injieren junto a su leche, cuando estos biberones son colocados en los aparatos calentadores micro- ondas.
Cuando colocamos un recipiente plástico en el micro-ondas o en el congelador; se libera una sustancia llamada dioxina que envenena las células de nuestro organismo. Recientemente leí un articulo del Dr. Edgard Fujimoto, director del programa Wellness, del Hospital Castle, quien enfatiza que cuando calentamos recipientes de plástico o cubiertos con este material, en estos equipos, corremos el peligro de injerir en nuestros cuerpos la dioxina que estos materiales despiden en esas altas temperaturas siendo esto sumamente dañino y peligroso para nuestro cuerpo.
Imaginen cuantos padres hay que se les hace muy cómodo preparar varios pomos de leche o biberones, para que sus hijos no pasen trabajo y cómodamente lo succionen por una tetera de goma, que también se ve expuesta a estas radiaciones que dañan el organismo de los pequeños. Sé que es una comodidad. No cabe dudas. Sin embargo estamos poniendo en un alto riesgo la vida de nuestros hijos.
Se recomienda que todo lo que calentemos en los micro-ondas este en vasijas de cristal, y de ser posible tapadas o cubiertas con una servilleta de papel blanco pero nunca sin nada.
La vida moderna y agitada de hoy en todos los países, nos hace usar los métodos más modernos para poder hacer la cotidianidad más confortable, sin embargo tantos los niños pequeños, como los adultos, están expuestos a serios peligros con el uso no adecuado de algunos de estos nuevos aparatos electrónicos modernos, incluyendo las mismas computadoras.
Los biberones tienen una edad y requieren de nuestro cuidado para no poner en riesgo la vida de los infantes. Enseñemos a nuestros pequeños desde que empiezan a valerse a utilizar sus manitos, las vasijas y cubiertos adecuados para cada edad. Podemos evitar que nuestros hijos, nietos, sobrinos, hermanitos, tengan que ir al ortodoncista para corregirse los dientes permanentes, a causa de las desviaciones de un biberón fuera de su edad. Pero lo más importante es también protegerlos de enfermedades más serias como el cáncer que pueden adquirirse por el calentamiento de los alimentos de manera rápida.
Los dejo a la reflexión de este artículo que ha tocado las fibras de mi persona en el pasado.

viernes, 6 de agosto de 2010

LA INSEGURIDAD

Enfermedades de aptitud: La inseguridad

Para mi hay enfermedades que no son físicas pero son más difíciles de curar que aquellas que lo son. Ellas crecen con uno porque vienen de nuestra infancia. Por ello la importancia que tiene dar una buena atención a los niños por parte de aquellos que le cuidan.
La inseguridad es esa aptitud de la cual hoy quiero hablar y tratar de ofrecer ciertas pautas para tratar de cambiarla o eliminarla de nuestras vidas.
Cuando uno no se siente seguro es incapaz de tomar decisiones. Trata de que otros tomen la iniciativa o lo consultan todo con aquellas personas que le rodean. Este tipo de persona no puede emprender negocios y se ata a lo que tiene, aferrándose a veces a una serie de limitaciones, pobreza y otras circunstancias, porque temen perder cierto estatus y no poder hacer frente a determinadas situaciones.
Es verdaderamente triste ser una persona insegura. Es una señal de que nunca fue elogiado durante la niñez, sino más bien se le reprochaba algo, o se le dio exceso de responsabilidades con las cuales a penas podía cumplir. Algún miedo se le inculcó al niño a la hora de comer o de dormir. En fin pueden ser muchas las causas para que una criatura crezca con inseguridad.
No soy psicóloga; pero en mi vida he tenido que superar muchos obstáculos y para ello mi tarea ha sido leer, estudiar y enseñar. Por ello estos temas han sido motivación para impartir charlas y poder ayudar a los demás. No cabe dudas que es una ardua tarea vivir y que nadie nos enseña; sólo la vida a su paso nos va dando las lecciones.
Aquellos seres inseguros a veces viven en relaciones catastróficas y no se salen de ella. Soportan maltrato por no verse solos. El temor les invade, porque no se creen capaz de tomar las riendas de su vida permitiendo ser manejados como marionetas.
Hay que entrar a las profundidades de nuestros recuerdos a ver que sucedió. Cómo nos trataban nuestros padres, que nos decían de nuestro comportamiento, hay que saber que nos ha causado esta aptitud insegura.
Y una vez que hemos recordado empezar a trabajar en perdonar a quienes nos dañaron cuando éramos infantes. Esta parte es muy importante no nos debe quedar una gota de resentimiento interior.
Comenzar a tomar elecciones sin consultar a otros. Elegir lo mejor nos conviene no es tarea de nadie simplemente nuestra.
Dejar de utilizar las palabras tu crees qué y empezar a decir yo decido que esto debe ser así.
Una vez que te sientas confortable eligiendo, hay que empezar a trabajar en abrirse a la prosperidad. Pensar sin limitaciones. Empezar a decir No o Si, si es necesario sin dudar. Si estamos ligados a un pequeño salario pudiendo aspirar a uno superior, comenzar a buscar aplicaciones u otras posibilidades de cambio. No ser conformistas. Tratar de mejorar nuestra vida sin miedo, sintiéndonos con la capacidad suficiente para llevar a cabo una nueva meta.
Escribir nuestros deseos en un papel y leerlos todos los días antes de acostarnos para poder visualizarlos y materializarlos. Tachar aquellos que se cumplan y colocar nuevos en sustitución.
Vivir el día de hoy, el futuro está por llegar y el pasado ya se vivió. Pensar que hoy todo esta bien en tu mundo. Dejar a un lado la duda de lo que puede pasar. Los temores de lo que podría suceder. Sentirse seguro y rodeado de amor.
Fortalecer la fe es muy importante porque nos enseña que no estamos solos en el Universo y que alguien nos protege en todo momento. Las personas que tienen creencias y fe se sienten más seguras y acompañadas.
He aquí estas pautas que pueden ayudarte para dejar atrás una vida de inseguridades que puede hundirte en un abismo o detenerte a las inmensas posibilidades del triunfo. Si tienes un talento único que desde siempre te acompaña y no lo has puesto en función de tu vida, muéstralo, sácalo de tu interior y lucha por ese don que Dios te ha entregado. Deja los miedos, los que dirán, las inseguridades y trata de poner en marcha un plan de acción para triunfar. Lo puedes lograr. La inseguridad es una enfermedad de aptitud, supérala.